A lo largo de los años han sido muy felices en su profesión pedagógica contribuyendo a la formación integral de muchos jóvenes, pero nunca tanto como cuando han visto encenderse en la mirada de sus alumnos el súbito brillo de la comprensión intelectual. Ese es el más fecundo y persistente legado de la tarea docente. La entrega está a cargo de la Jefe de Preceptores Lucrecia Ferro.